sábado, 26 de noviembre de 2011

Felicidad, qué bonito nombre tienes

Quiero estar en una pequeña casa, con un patio y un limonero. Tumbado al sol de la tarde en mi hamaca, tan cómoda como vieja, tocando mi guitarra mientras observo que en el arriate crecen los tomates.
Huele a jazmín abierto.
Silenciosamente se acerca mi perro y lametea mis dedos descalzos, haciéndome cosquillas el muy cabrón. Él se para delante de mí a escucharme, mirándome fijamente, haciéndome sentir seguro.
Suelto la guitarra y le acaricio la cabeza contándole que todo va a salir bien.
Me levanto y pongo en el tocadiscos mi canción para soñar.
De repente se abre la cortina de la puerta y sale ella de la casa, con el pelo enmarañado y cara de recién levantada de la siesta.
Dice: "Me encanta ésta canción."
Echa café en nuestras tazas y se sienta a mi lado, en su hamaca.
La miro y no puedo parar de sonreír. Me mira y dice: "¿Qué pasa?", a lo que respondo con una sonrisa aún más amplia.
Cojo la guitarra otra vez y le canto la canción que le escribí.
A ella no le importa lo mal que yo cante, igual que a mí no me importa que nadie más me escuche.
"Qué tonto eres."

Miro el limonero: "Hay que ir cogiendo ya los limones..."

lunes, 31 de octubre de 2011

Adolescentes Fluorescentes

Escuché una canción sin saber lo que decía.
Quería ver algo que suele estar en tus ojos. Era sólo una pregunta: ¿Cuándo? Y ahora sé cuánto te echo de menos en el cielo.

Solo tú sabes quién te vigila desde la esquina. Solo tú lo permites.

Se que no es difícil para ti empezar a creer, pues, cuando el día llega el brillo no te deja ver.

Las mejores cosas las encuentras cuando ya estás lejos. Y yo me encuentro aquí, sabiendo todo lo que has esperado, demasiado tiempo, a que yo me quisiera enterar de cuánto te echo de menos en el cielo.

Escuché una canción sin saber lo que decía, pero quise pensar que hablaba sobre ti y que era yo el que la cantaba.


martes, 2 de agosto de 2011

Nunca sobreviviremos si no nos volvemos un poco locos

No se me dan bien las manualidades.
No se me da bien la política.
No se me da bien el deporte.
No se me da bien hacer de comer.
No se me da bien estudiar.
No se me da bien conducir.
No se me da bien el papeleo.
No se me da bien bailar.
No se me da bien concentrarme en lo que dices.
No se me da bien ordenar mi habitación.
No se me da bien consolarte.
No se me da bien darme cuenta de lo que pierdo.
No se me da bien conversar.
No se me da bien servir.
No se me dan bien los amigos.
No se me da bien estar presentable.
No se me da bien escribir.
No se me da bien elegir.
No se me da bien cuidarte.
No se me da bien estar cerca de tí.
No se me da bien enamorarme.


No se me da bien explicarme.


lunes, 20 de junio de 2011

Cosas que arrasan

Ella: ¡Hey! ¡Cuánto tiempo!
Él: Casi un año ¿No?
Ella: No sé, no recuerdo.
Él: Sí, casi un año.
Ella: Si tú lo dices será así, Je Je
Él: ¿Sabes qué? Paso de preguntarte que tal te va y todas esas mierdas. No eres un encuentro cualquiera, así que no diré ni haré cosas cualquieras.
Ella: Bueno, yo tengo que ir a...
Él: Me da igual donde tengas que ir. ¿Sigues con él?
Ella: ... Sí.
Él: ¿Lo sigues queriendo igual?
Ella: ¿Por qué me lo preguntas?
Él: Es obvio, aún te deseo.
Ella: Me dijeron que estabas con una chica muy mona y simpática.
Él: Es cierto.
Ella: ¿No te va bien con ella?
Él: No como me gustaría que fuera. Pero es imposible. Ella no es tú.
Ella: ¿Y por qué estás con ella?
Él: Es un poco atontada. Poca variedad de conversación. Pero es muy guapa, está muy buena, huele muy bien y me quiere. Me cuida. Me sirve.
Ella: Es un poco cruel.
Él: ¿Qué esperabas de la verdad?
Ella: Tenía la esperanza de que lo hubieras superado.
Él: Mentira. Tú me deseas tanto como antes. De hecho creo que aún más.
Ella: Eres muy arrogante.
Él: Intenta negarlo.
Ella: No te deseo.
Él: Yo a ti tampoco. Te necesito.
Ella: Sabes que nunca seríamos felices.
Él: No busco ser feliz.
Ella: Estás loco.
Él: Niégame un beso.
Ella: Ni se te ocurra besarme.
Él: No lo haré. Lo harás tú.
Ella: ¿Por qué me haces esto?
Él: Porque no llegamos a exprimirnos al máximo. Y me arrepiento cada día. Nunca llegaré a entender por qué no intentamos llegar más allá. No entiendo por qué te daba miedo. Sólo quiero probarlo todo contigo. Conocer cada uno de tus rincones más oscuros hasta que encuentre algo que me haga odiarte o hasta que ya no pueda conocer nada más interesante de ti.
Quiero enamorarme de ti hasta asfixiarme por tu ausencia.
Lo que menos soporto es la idea de que tú también quieres lo mismo y no lo aceptas. No lo dices, pero lo se.
Ella: ¿Por qué estás tan seguro?
Él: Porque siempre vuelves a mi mente.
Ella: Eso no tiene sentido.
Él: No espero que lo comprendas.
Ella: Estoy con él.
Él: Pero quieres estar conmigo.
Ella: Y tú con ella. ¿Quieres hacerle daño?
Él: Soy un egoísta, un mierda. Lo asumo. No iba a durar para siempre. Es una relación tirita. Para tapar la herida abierta de otra y que no haga rozadura con los zapatos de la vida.
Ella: ¿Por qué tienes que volver siempre a mí?
Él: Quisiera llamarlo destino, pero vuelvo porque lo provoco yo mismo.
Ella: Ésto no va a salir bien.
Él: De eso estoy más que seguro, pero es necesario.
Ella: Te odio mucho.
Él: Yo a ti más.


El Beso.



domingo, 5 de junio de 2011

Y ahora algo completamente diferente

Palabras que riman o lo intentan
Capítulo II:

"Mis pestañas me han contado
que ahí fuera no hace sol
todo el suelo está mojado
pero encima hace calor

No hay color entre mis dedos
y me quema este colchón
retorciéndome en el miedo
de perderme tu sabor"


"Tú que sólo quieres fumar
dejar de existir un minuto
reirte y tontear

Desde aquí huelo
el humo en tu pelo
me hace estornudar"


"Hazme un favor:
rompe mi nariz

Pregunta si puedo entrar

Di que vas conmigo
conviértete en mi actriz"



"¡Joder! Qué bonito es todo
y qué poco contento estoy
Con Ray Charles de fondo
para quemar el dia de hoy"


"No obsesiones mis mañanas
no me hagas pensar en ti
no me beses con ternura
ni me quieras sólo a mi"


"Y así me encuentro yo
pateando latas por la calle
por culpa de las ganas que me salen
a causa de las faldas al aire"


"¿No se cansan de tanto hablar?
¿No se cansan de no hacer nada?
¿De sentir pena por todos
sin responder a sus llamadas?"


"Me gusta el olor a cerillas
y su sonido al encenderlas
Cuentan que el fuego es vida
a mi me recuerda a ella"


"¿O tus mañanas o mis ayeres?
me quedo con Ahora
Se cortaron los placeres
y volaron las palomas"



Porque me da la gana.